domingo, 8 de febrero de 2009


NIEVE SOBRE MADRID

Primero una reflexión general. Cuando hay sequía y los pantanos se quedan vacíos, todos decimos: Es que tiene que llover en el invierno, es que debía nevar más. Bien, este año llueve y nieva y lo hace de la forma de le da la gana a la naturaleza, aquí o allí y con la intensidad que quiere, pero nosotros también nos cabreamos.

Por tanto amigos, creo que lo primero es reconocer que nunca llueve o nieva a gusto de todos, que son fenómenos raros en casi toda España y que no estamos preparados como en los países nórdicos, ni podremos estarlo, no olvidemos que en Madrid o en Rivas nieva cada cuatro o cinco años, ellos tienen problemas cuando hay una ola de calor y les suben las temperaturas a 35 grados, cada uno está preparado para una cosa.

Y hecha la reflexión, veamos que ha pasado. En primer lugar que todo estaba precioso y que los crios y bastantes mayores disfrutamos de lo lindo. También, que al ir a trabajar el coche patinaba que daba miedo, yo me llevé dos sustos serios y comprobé mi inexperiencia como conductor sobre nieve helada y me pregunté, ya tarde: ¿Debería haber dejado el coche en el garaje con unas condiciones como estas?. Por cierto, no pidáis tanta sal en las calles que no es buena para las aceras ni para el medio ambiente, se saliniza todo, la tierra, el saneamiento, los ríos, etc.

Y a propósito, quiero felicitar a los Servicios de Mantenimiento de nuestro Ayuntamiento, que no con muchos medios invernales, fueron capaces de tener las grandes vías limpias a primeras horas, luego me enteré del esfuerzo y sacrificio de muchas personas de esa Concejalía. Diferente puede ser la limpieza de las calles en los días posteriores, pero eso es otra película y otros actores. Lo dicho, gracias.

Sin embargo hubo otras actitudes que no fueron tan gratas, como por ejemplo, criticar que se cerraran las pistas de Barajas durante unas horas. ¿Qué hubiera pasado, si un avión tiene un accidente? ¿Qué hubieran dicho los mismos que protestan por su cierre?. Por cierto, es el aeropuerto que diseño y que inauguró anticipadamente Aznar. ¿Por qué no lo diseño a prueba de nevadas y de nieblas? Y de paso a prueba de controladores enfermos, pos nochevieja, o de pilotos en celo, perdón en NO huelga de celo.

Y una sincera pregunta ¿Por qué tiene que dimitir Magdalena Álvarez por los problemas que causaron las nevadas y no lo tienen que hacer Esperanza Aguirre o Alberto R. Gallardón? ¿Es que la M-203, la M-45 o el resto de carreteras, competencia de la Comunidad, estaban limpias y sin atascos? ¿Es que en las calles de Madrid no había nieve, ni problemas de tráfico, caídas o resbalones?

Hemos visto por la tele, como se colapsaban Londres o París, como se cerraban sus aeropuertos o se suspendían vuelos a mansalva, como los transportes públicos se paraban, pero la gente de estos países, mucho más acostumbrados a estas inclemencias del tiempo que nosotros, lo sobrellevan. Creo que ciertas veces, los españoles, somos muy indulgentes con algunas cosas y otras muy exigentes, no siempre tienen razón los periodistas televisivos.

En fin, creo que estos sucesos, lo que deben hacer es que todos reflexionemos, unos mejorando los servicios y otros, haciendo más caso a las recomendaciones de protección civil y el Sr. Rajoy o sus adláteres antes de hablar de los demás, arreglando su patio interno, que por lo visto y oído tienen tela que cortar, entre espionajes, dossieres, malversaciones, cohechos, paraísos fiscales, etc., etc., etc.,…… y aquí nadie da explicaciones, nadie dimite, montan Comisiones para controlarlas y manejarlas y solo hablan de los demás.